Elepés (primer tiempo)

http://es.wikipedia.org/wiki/LP
Qué pensar, o qué decir, si en Wikipedia lo único que dice es lo que sigue

Un disco LP (del inglés long play) o disco de larga duración, es un disco de vinilo de tamaño grande, de 12" (30,5 cm) de diámetro, en el cual se puede registrar, en formato analógico, un máximo de unos 20-25 minutos de sonido por cada cara. Los LP suelen constar de unas diez o doce canciones, dependiendo de su duración. Normalmente están grabados a una velocidad de 33 y 1/3 revoluciones por minuto, aunque también los hay de 16 RPM.
Los primeros discos de larga duración se comercializaron hacia 1948. Este tipo de disco fue la principal manera de publicar música grabada durante los años 50, 60, 70 y 80 del siglo XX.
A partir de mediados de los años 80, los LP empezaron a perder protagonismo a costa de los discos compactos, más pequeños y resistentes. Aunque finalizando la primera década de los años 2000 son cotizados por coleccionistas y audiófilos.
Algunos Disc jockeys consideran superiores a los discos de vinilo de larga duración y utilizan este formato para hacer sus mezclas porque tienen mayor resistencia que los sencillos

Igual y no se necesita (decir o entender) mucho más. Sesenta y un años de su nacimiento en realidad es una gota en un océano. Y si en esa gota caben tantas cosas...

El soundtrack de la vida de uno puede abarcar muchas historias que aunque coinciden no necesariamente convergen, con un hilo conductor que se extiende también con la memoria de momentos, presencias y sentimientos.

Sin olvidar mi entrada anterior y para mejor no olvidarla, es que abro esta, que promete también ser como un taller mecánico en el que hay que meter mano y seguir hurgando en la cabeza las formas y los modos de reconvertir en oro las fundas, la información que traen, los contenidos de los LP's de la memoria, acompañados a veces con los audio cassettes que recuperan completos o a pedazos algunos de esos memorables discos.
El caso es que, a querer o no, uno tiene que referirse a la propia edad para dar cuenta del vasto, enorme, maravilloso e inabarcable, continente que ya no está en circulación, o no lo está muy activamente. Afortunadamente para mi, en algún aniversario de boda, por cierto ya no muy reciente, la sugerencia fue adquirir uno de esos modulares, con cassette y CD incluido, que tienen una tornamesa, en donde de vez en cuando pongo alguno de los muchos (je) LP's que sin duda seguiré guardando, atesorando. Hasta que mueran por excesivo uso.
Por lo pronto, una reflexión, en toda la extensión de la palabra, que empezó como un mareado texto en tinta roja, que rescataré en su momento, y que se materializó en varias hojas de mi cuaderno acompañante de todos los días.
Va. Con la advertencia que esta será una entrada que deberá estar adornada con imagenes ad hoc y salpicada con comentarios y, si no lo digo, exploto, fichas que documentan el horizonte de los larga duración en mi poder o en mi imaginario. Ya llegará el momento. Por lo pronto...

Igual y uno no está conectado porque la vida pareciera ser otra cosa.
Uno nació antes, incluso que naciera el Compact Cassette. Por supuesto, mucho antes que muriera (prácticamente) el acetato. Apenas todo parecía un simple asunto de velocidades (había por ahi, 78 rpm.) entre 33 y 45 revoluciones por minuto. No más. Y muchísimo antes que surgiera el CD, el DVD (para qué decir del Blue Ray, aunque hubo discos laser y otros formatos).
Fueron inclusotiempos del 8Track, y del cine en Panavsión, Cinemascope, e incluso Cinerama, por no olvidar el casi standard 70 mm. Mucho antes de la ¿primera? revolución del sonido Dolby... La tercera dimensión no era un trademark, como ahora lo es el 3D.
La revolución de la música, o la imagen, a fragmentos, no existía. No que no se concibiera, e incluso se hiciera patente, presente, evidente.
La palabra viajaba por la boca, por los libros y por las revistas. Nada más. Era nada más concreta y directa.
La fotografía era todavía un proceso alquímico. No era un uso desechable, efímero.
La mercadotecnia misma se limitaba a golps aislados en un mercado que no aspiraba a ser global.
Los cines eran templos,no remedos, o complementos, de un centro comercial.
Las voces se quedaban, persistían, porque era posible intimar con los sonidos, poseerlos como expresión última de un deseo, una necesidad, una búsqueda.
Las palabras virtual, o binario, no estaban generalizadas, ni siquiera podían aspirar a tener vida propia.
Tener una consola era un privilegio y un goce, para poder escuchar una y otra vez, el o los discos de la preferencia o la ocasiión. La tornamsa podía, incluso, permitir escuchar, por vez, custro o cinco diferentes caras, lados (lado A, lado B) de un, se decía Long Play.
Ahora, una sesión long play puede llegar a tener, si he escuchado bien, más de mil grabaciones. Los surcos ya no existen.
Vivir con los audífonos en el oído, o las manos en el teclado de un teléfono celular, aún en la oscuridad de un cine o en laincierta intimidad de un baño público, o en la vana, mívil realidad de un pasillo de supermercado, no era siquiera concebible,
Ahora ya no piensa uno, y busca, hablar por teléfono. Simplemente se habilita. Y habla. O escucha. O mira el texto que aparece, perentorio o fugaz, para contarnos, requerirnos, o hacernos comparecer, si bien nos va.
Entonces, uno solo se conectaba, como aquí, a la página en blanco, con una pluma enhiesta o un lápiz con buena punta, a plasmar un pensamiento o una nota, o a subrayar un hecho o un hallazgo. O, simplemente, para seguir con los ojos los acontecimientos, las aventuras, los recuerdos, las descripciones que sobre una hoja de papel puedan manifestarse, ir surgiendo.
O se conectaba a un auricular de teléfono, a perderse por horas, con un amor no tan lejano, o con un amigo entrañable, incluso en horas de trabajo.
O a una pantalla pequeña, siempre limitada a un canal o un programa, alguna preferenia; o a la enorme blancura, como en el cine, con horarios casi siempre fijos, y sin prisas.
O a un programa de radio, donde lo importante era seguir las pautas de lo que decía el conductor o el comentarista o la canción del momento (o del recuerdo) o los anuncios comerciales o los actores de la radionovela ocasional, o el inevitable, cuando había, flash informativo.
Conectarse. Y desconetarse, a voluntad. O por capricho. Casi igual que ahora, aunque de manera (quiero creer) menos mecánica, sin pensar mucho, que ahora.
Llenarse de lo que ofrece el ilimitado mundo de músicos, cantantes, orquestas, grupos, DJ's, artistas verdaderos, provocadores o marchantes. Pero con la misma reserva que uno tiene, el cuerpo, la disposición, al entrar en una regadera, a dejarse llevar por el jabón, la lluvia tibia que acaricia, el paréntesis en el mundo que está afuera y sigue su camino (día o noche) por un momento, al menos.
Una cosa lleva a otra. O trae consigo, alguna consecuencia: cambiar de humor, disponerse a la aventura, seguir con la rutina, armarse de valor, o simplemente estar co actitud fragante, beligerante, receptiva, para seguir el día.
Con o sin cables, con o sin rumbo, con o sin destino, con o sin agenda.

Los míos no son, entonces, todavía, los que un amigo glosa en su originaria provocación:

Ayer eche un vistazo en los viejos albumes LPs y entre los mas preciados para mi presumo:

The cure Desintegration Quit Riot condition critical
(excelente portada)

Bob Dylan Knocked out loaded

Pink Floyd Works

Bee Gees greatest hits

Ac Dc if you want blood

Jimi Hendrix greatest hits

Ray Charles greatest hits

James brown sex machineeeee

Brother in arms Dire Straits

Point of know return Kansas

The Wall Pink Floyd

Afinidades, habrá muchas, pero hoy, nada más, una lista en la que, a lo mejor hay algo de lo más preciado y que, digamos nada más cito, para incitar algún posible modo de dejar constancia y aprovecharla para algo. Apenas algo de blues, un infaltable, y uno de jazz. Para abrir boca, y sentidos:

Raw Blues (Richmond High Fidelity/London/Peerless, 1974). John Mayall, Eric Clapton, Otis Spann, Champion Jack Dupree, Curtis Jones, Peter Green, Steve Anglo. Catorce cortes

Together! Johnny & Edgar Winter (Epic, 100 años del sonido grabado 1877-1977/1976, Blue Sky Rec.). Siete cortes, incluyendo un Rock & Roll Medley con ocho piezas, nada menos)

The last of the british blues. John Mayall. Live from Baltimore, Cincinatti and N.Y. It's John Mayall! 1978- Diez cortes. La foto de la portada es de Terrance Bert. Los diseños de arte, producción y arreglos, John Mayall. Musart. Licencia ABC Record, Inc.

Live. Muddy Waters. Chess Records, 1977. Diez cortes

Blues Roots. Big Mama Thornton, Alex Moore, Mercy Dee, Sidney Maiden, Earl Hooker, John Littlejohn, Lowell Fulson, Earl Hooker, Jesse Fuller, Fred McDowell, Martin Fulson, "Big" Walter, Johnny Young, Joe Williams, Joe Turner, Lightnin' Hopkins, Pete Johnson, John Jackson, R.C. Smith, Cleveland Chenier, George Coleman, Mance Lipscomb, Chilton Chenier, Black Ace, Juke Boy Bonner, Bukka WhiContte. Album doble. The Tomato Music Company Limited, NY. Producido y grabado por Chris Strachwitz. 1978. Milton Glazer, diseño. 26 cortes

The Cole Porter Singbook. Ella Fitzgerald. Ella's brilliant performance of 32 of Porter's greatest songs. Album Doble. Verve. 1976. Originalmente V-4001-2. Producido por Norman Granz. Robert Kimball y Chris Albertson, comentarios.

Parker's Mood. Sadao Watanabe. Live at Bravas Club '85 (Laforet Museum Akasaka, Tokio, julio 13, 1985). Warner Pioneer Corporation, 1985. Seis cortes. Producciones WEA, grupo Warner Communications

Tristeza on Piano. Oscar Peterson. (The jazz edition, vol.3. Jazz Unlimited. Special Series) Polydor International. Producciones Lubata, S.A. 1985

...

Hasta el momento, en http://lpcoverlover.com/ no apareció ninguna portada. Hay una que corresponde a Raw Blues, pero es un disco en japonés y, efectivamente está en idem tratar de empalmarlo con el que está en mis manos.

Parece que http://www.albumcovers.net/fr_frameset.asp pudiera ser un buenrecurso.
En http://homepage.mac.com/danielmartin/Dylan/html/albums/picts.html aparece KNOCKED OUT LOADED: CDCBS 86326 (Manufactured by CBS/Sony in Japan), Playing Time 35:36recorded July 1984 / May 1986 released August 8, 1986: http://homepage.mac.com/danielmartin/Dylan/html/albums/1986-KnockedOut.html

O, lo que una búsqueda simple (una categoría simple) puede traer, de riqueza o de ricura, en imágenes, en letras, en emociones: http://www.google.com.mx/search?rlz=1W1SNYO_es&hl=es&q=the+point+of+know+return&meta=&aq=f&oq=

Continuar, entonces, es cosa de tiempo y ganas

Retomar e integrar

Escuchar

O, nada más dejarse llevar por los efluvios lacónicos del cuarzo, cuando así se pueda